Primero debemos empezar por entender lo que es una fruta o verdura orgánica.
Las frutas o verduras orgánicas son aquellas en las cuáles, durante el proceso de cultivo, no se utilizaron fertilizantes, pesticidas o algún otro elemento químico para su producción.
Además, tampoco pueden ser resultado de un proceso de modificación genética.
Hay que observar la forma
La naturaleza no produce 2 frutos idénticos. Si tú vas a un supermercado y observas unas frutas perfectamente idénticas, es señal de que algo no anda muy bien. Si en cambio, ves que las frutas de un determinado estante no son uniformes, es buena señal.
Observa el tamaño
Generalmente conocemos el tamaño normal de una fruta. Si tú te encuentras una fruta de tamaño desmesurado, posiblemente no sea orgánica. Esto no quiere decir que una fruta orgánica no pueda ser de gran tamaño, pero no es la norma.
Observa si hay insectos o marcas de éstos
Aunque no nos guste reconocerlo, los insectos juegan un papel fundamental en el control de plagas. Normalmente en los cultivos orgánicos, podremos encontrar señales de algunos insectos, o insectos en la fruta.
Esto es una buena señal de que esa fruta no ha sido bañada en pesticidas.
Observa el aroma y sabor
En cuanto a su aroma y sabor, las frutas orgánicas son superiores. Tienen un aroma mucho más delicioso y su sabor es mejor. Por lo mismo, aunque su precio suele ser más elevado, lo compensa los beneficios para tu salud así como su sabor y aroma superiores.
En La Galera Food & Services, contamos con frutas orgánicas y convencionales, para que tengas siempre a tu disposición la mejor elección.